Vall Llach elabora este vino a partir de uvas procedentes de viñedos muy viejos, algunos de los cuales tienen más de un siglo de antigüedad, pertenecientes a fincas seleccionadas propiedad de varios viticultores que han colaborado con nosotros desde nuestra fundación. Desde la bodega seguimos de cerca las parcelas de los campesinos que trabajan con nosotros. Siempre hemos pensado que este vino (Priorat), es el resultado del esfuerzo colectivo, de campesinos y campesinas comprometidas con la tierra que nos venden sus uvas cobrando un precio justo, que les permite trabajar con dignidad y asegurar un futuro en su oficio. Ésta es la razón principal por la que los fundadores de la bodega empezaron a elaborar este vino: para mantener el tejido social que nos define y asegurar que los agricultores puedan ganarse la vida trabajando su tierra con dignidad, permitiendo que las generaciones futuras se impliquen en el trabajo de la tierra, sabiendo que pueden encontrar un futuro en ella. Y este objetivo sigue impulsándonos, no sólo produciendo el Priorat, sino también realizando otras muchas acciones para dar vida a nuestra comarca.